A día de hoy parece que nadie consigue bajar su peso corporal y ,en particular, su % masa grasa si no cuenta las calorías que come diariamente. Cada día nos contactan decenas de mujeres desesperadas porque no hacen más que hacer dietas en las que se cuentan calorías y se distribuyen en porcentajes de carbohidratos, proteínas y grasas. La gran capacidad del cuerpo de adaptarse hace que en semanas o en pocos meses, el cuerpo no responda a esa dieta hipocalórica y la decisión que se toma es bajar aún más las calorías, disminuyendo el gasto calórico basal, entrando en una rueda sin fin que hace que la persona desista.
En nuestro caso, tenemos una visión más fisiológica de la nutrición y por eso atendemos a detalles como la predominancia hormonal que cada cuerpo posea. En cada mujer predomina un tipo de hormonas que influye sobre las formas del cuerpo y la reacción de éste ante determinados alimentos. Por eso, para estar saludable, debes seguir una alimentación y hacer ejercicios que se adecúen a la glándula que manda en tu organismo.
Por ejemplo, en la fase premenstrual la progesterona se incrementa y hace que bajen los niveles de azúcar en sangre, incentivando a comer más alimentos, sobre todo los de sabor dulce. Durante la ovulación tu cuerpo libera estradiol en grandes cantidades que hacen disminuir la sensación de hambre.
Cuando la tiroides funciona aceleradamente, la persona se mantiene delgada, está nerviosa e hiperactiva, pero si funciona más lento de lo normal, sube de peso fácilmente, se deprime y tiene un bajo ritmo de actividad: aletargamiento, desgano.
Teniendo en cuenta este enfoque, la mayoría de mujeres que nos contactan no están conformes con su imagen corporal, cumpliendo ésta (casi siempre) algunos de los cuerpos que te presentamos en la imagen de abajo.
Las mujeres con tipo “gonadal”, las glándulas dominantes son las gónadas que producen las hormonas sexuales femeninas: los estrógenos. El típico cuerpo femenino que llamamos con forma de pera: hombros estrechos, cintura pequeña y caderas anchas, la grasa se deposita en caderas y extremidades, más en piernas que en brazos. Estos cuerpos tienen, en general, un déficit proteico, lo que produce un gasto metabolismo basal escaso.
¿Cómo actuar? No contar calorías y enfocarse en nutrientes, más proteínas para activar el metabolismo y aumentar la masa muscular, a través de la alimentación y la actividad física.
En las mujeres del tipo hormonal “adrenal” las glándulas dominantes son las adrenales que producen las hormonas andrógenos: hormonas sexuales masculinas, adrenalina y cortisol. Este modelo de cuerpo es el que acumula grasa en el tronco, son mujeres anchas de hombros, pecho y cintura. Estructura corporal fuerte y firme, con extremidades musculosas, sus caderas son más estrechas que sus hombros, dando lugar a un cuerpo con forma de triángulo invertido o también conocida forma de manzana. En líneas generales, tienen masa muscular suficiente, suelen hacer ejercicio regularmente, aunque quizás no comen bastante, le es difícil seguir dietas.
¿Cómo actuar? Pautar ingestas, un desayuno ligero, una comida más sustanciosa y una cena con baja cantidad de carbohidratos, aumentando el consumo de vegetales y frutas.
A modo de recomendación para todos: ¡no olvidemos el consumo de agua!
Vale aclarar que no hay una alimentación perfecta ni estándar. Cada persona es un individuo y habrá que adaptarse a sus gustos, necesidades y a su contexto.
PD: Y todas somos bellas tengamos el cuerpo que tengamos.
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Un saludo y que tengas un buen día.
Articulo desarrollado por Verónica Fernández
Licenciada en Nutrición
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética
